sábado, 30 de junio de 2012

Luc Montagnier

Aunque muchos disidentes lo señalan como cómplice de la farsa, la posición tomada por Luc Montagnier en esta etapa de la historia de la enfermedad, es sin duda un respiro para aquellos seropositivos confundidos.

Luc Montagnier, ex trabajador del Instituto Pasteur, es un profesor, virólogo y médico francés, ganador del Premio Nobel de la Medicina en el año 2008 por haber descubierto el virus VIH.

Aunque su colega Robert Gallo haya salido primero en una rueda de prensa convocada por Margaret Heckler el 23 de abril de 1984 para ser reconocido como el descubridor del VIH; Montagnier ya había logrado visualizar algo extraño por primera vez en la sangre de un individuo infectado un año antes de él. Al menos esa es la historia formal.

En 1984, la situación del SIDA había comenzado a crecer poco a poco y sin duda, tanto científicos estadounidenses como franceses debían marcar posición sobre la situación. Ambos concluyeron que el SIDA era provocado por el virus VIH y desde ahí las cosas han estado iguales hasta nuestros días.

En el momento que Gallo, hace su entrada protagónica, se promete una vacuna en menos de  4 años, pero al parecer el negocio resultó lucrativo y no valía la pena cerrarlo tan pronto.

Robert Gallo y Margaret Heckler en la Rueda de Prensa realizada el 23 de abril de 1984 con motivo del supuesto descubrimiento del VIH.

En principio, Luc Montagnier mantuvo la idea del virus que llevaba al SIDA; sin embargo, recientemente este premio nobel ha comenzado a ser considerado por muchos como un pseudocientífico, homeópata, botánico y hasta brujo. La razón es muy sencilla. Luego de varios años manteniendo una postura del virus que él mismo descubrió, hoy por hoy Luc Montagnier dice que el VIH puede ser expulsado naturalmente del cuerpo.

Para Montagnier, la causa del SIDA son las enfermedades o cofactores que deprimen el sistema inmune. Por ejemplo, en el caso de África, al detener la malaria, la tuberculosis, la parasitosis, fomentar el higiene genital, entre otras medidas de salubridad, se podría no solo erradicar el SIDA sino que en combinación con una buena nutrición y antioxidantes, el VIH se expulsa naturalmente del organismo.

Increíblemente habla de que la gente espera la vacuna, pero tal vacuna nunca vendrá. Menciona que la solución que incluye vitaminas, alimentación e higiene, es la solución más económica y por eso a nadie le gusta, comenzando por la industria farmacéutica.

Para los que aún tienen dudas sobre si el HIV existe; ¿Quién mejor que el descubridor, casi 30 años después, para decirnos que es algo que se puede expulsar del cuerpo tomando medidas sencillas?


Aquí, un pedazo del documental House of Numbers donde Luc Montagnier hace el contoversial comentario:

Los test del VIH

Sin duda una de las peores situaciones desde que etiquetan al paciente como VIH+, es el momento en el que le indican que es VIH+. El reflejo de tristeza en el rostro de cada individuo del laboratorio es imposible de disimular. Muchas de estas pruebas son accidentales, generalmente por orden de un médico para un examen de embarazo o un pre operatorio. Inmediatamente luego de la noticia, el mundo comienza a girar lentamente y un sinfín de recuerdos comienzan a pasar por la mente del afectado a un millón de cuadros por segundo. Mientras el bioanalista intenta ser un soporte en ese momento de tensión, la persona piensa; "¿Qué debo hacer?", "¿A quién debo llamar primero?"

Varios casos han ocurrido en el que los pacientes diagnosticados VIH+ acuden al suicidio como forma de evitar todo el sufrimiento que la ciencia amablemente les promete. No son mitos urbanos aquellos donde luego de haberse quitado la vida, el examen había sido un error o interesantemente haya sido un “falso positivo”
 

¿Qué es un falso positivo?

Toda aquella persona que haya pasado por la angustia del test VIH sabe lo que es un falso positivo; ya que es la última carta que les queda bajo la manga para apostar nuevamente por una vida “Feliz”. 
Resulta que el test del VIH, es tan “eficiente” que hay que hacerlo unas 4 veces para detectar si en verdad hay una infección del virus.
Un falso positivo es cuando el test toma una proteína diferente al VIH identificándolo como tal, algo que sorpresivamente solo pasa con esta prueba.

Tomando extractos del artículo del Test del SIDA de la red amiga Superando el Sida:

La periodista de investigación Christine Johnson aporta una relación de casi 70 causas documentadas en la literatura científica, que pueden producir resultados positivos en el – mal llamado - test de VIH. Nótese que la autora se refiere a estos resultados positivos como “falsos positivos” y se debe aclarar que lo de “falsos” resulta engañoso, pues da a entender que existen positivos “verdaderos”, cuando la realidad es más simple, puesto que el mal llamado test de VIH no puede detectar jamás al VIH ya que este virus nunca ha sido visto, todos los resultados positivos del test son falsos.
Listado de la literatura científica de condiciones que causan reacción falso-positiva en los tests de anticuerpos del VIH:

  1. Presencia natural de anticuerpos poliespecíficose (Barbacid et al 1989; Healey &Bolton 1993).
  2. Anticuerpos a anti-carbohidratos (Zinder & Fleissner 1989; Healey & Bolton 1993; CORDES & Ryan 1995).
  3. Anticuerpos con alta afinidad por el poliestireno usado en los envases de los tests (Arnold et al 1994; Pearlman & Ballar 1994; Yoshida et al 1987).
  4. Anticuerpos HLA a leucocitos antígenos clase I y II (Blanton et al 1987; Bylund 1992; CORDES & Ryan 1995; Profitt & Yen-Lieberman 1993; Sayers et al 1986; Schleupner 1990; Schochetman & George 1992; Steckelberg & Cockerill 1988; Yu et al 1989).
  5. Inmunización pasiva (recepción de gammaglobulinas o inmuno-globulinas como profilaxis contra infección) (Ascher & Roberts 1993; CORDES & Ryan 1995; Gill et al 1991; Jackson et al 1988; Lai-Goldmnam et al 1987; Isaacman 1989;M Profitt & Yen-Lieberman 1993; Piszkiewicz 1987; Yale et al 1994).
  6. Administración de preparados de inmunoglobulina humana (Bylund et al 1992).
  7. Hipergammaglobulinemia (alto nivel de anticuerpos) (More et al 1986; Peterman et al 1986).
  8. Globulinas producidas durante gammapatías policlonales, muy común en grupos con riesgo de SIDA (Bylund et al 1992; Cordes & Ryan 1995; Schleupner 1990).
  9. Anticuerpos anti-linfocitos (Mathe 1992; Ujehelyi et al 1989).
  10. Anticuerpos anti-colágeno (encontrados en hombres gay, hemofílicos, Africanos de ambos sexos y gente con lepra) (Mathe 1992).
  11. Múltiples transfusiones de sangre (Cordes & Ryan 1995; Ng 1991;Peterman et al 1986; Proffit & Yen-Lieberman 1993; Schochetman & George 1992; Yu et al 1989; Sayre 1996).
  12. Individuos con defectos de coagulación (Bylund et al 1992; Schochetman & George 1992).
  13. Vacuna de la hepatitis B (Jackson et al 1988; Lee et al 1992;Pearlman & Ballas 1994; Profitt & Yen-Lieberman 1993).
  14. Vacuna antitetánica (Pearlman & Ballas 1994).
  15. Falsos positivos en otros tests serológicos, incluyendo RPR para sífilis (Bylund et al 1992; Fleming et al 1987; Moore et al 1986; Schleupner 1990; Schocheman & George 1992).
  16. Individuos sanos como resultado de malinterpretación de reacciones cruzadas (Bylund et al 1992).
  17. Anticuerpos IgM anti-hepatitis A (Schleupner 1990).
  18. Altos niveles de circulación de complejos inmunes (Biggar et al 1985; Moore et al 1986).
  19. Presencia de ribonucleoproteínas normales en humanos (Cordes & Ryan 1995; Schleupner 1990).
  20. Malaria (Biggar et al 1985; Charmot & Simon 1990).
  21. Leishmaniasis Visceral (Ribiero et al 1994).
  22. Tuberculosis (Kashala et al 1994).
  23. Micobacteria avium (Kashala et al 1994).
  24. Enfermedades autoinmunes: lupus sistémico eritematoso, escleroderma, enfermedad del tejido conjuntivo, dermatomiositis (Bylund et al 1992; Leo-Amador et al 1990; Pearlman & Ballas 1994; Proffit & Yen-Lieberman f1993; Ranki et al 1992; Schochetman & George 1992).
  25. Lupus Sistémico eritematoso (Esteva et al 1992; Jindal et al 1993).
  26. Artritis reumatoide (Ng 1991).
  27. Seropositivo por factor reumatoide, anticuerpos antinucleares, y otros autoanticuerpos (Kock et al 1988; Steckelberg & Cockerill 1988; Yoshida et al 1987).
  28. Anticuerpos anti-músculos lisos (Schleupnere 1990).
  29. Anticuerpos anti-mitocondriales (Cordes & Ryan 1995; Schleupner 1990).
  30. Anticuerpos anti-microsomal (Mortimer et al 1985).
  31. Otros anticuerpos antinucleares (Cordes & Ryan 1995; Schleupner 1990).
  32. Anticuerpos anti-antígenos de células T (Cordes & Ryan 1995; Schleupner 1990).
  33. Fracaso renal (Cordes & Ryan 1995; Jindal et al 1993; Schleupner 1990).
  34. Hemodiálisis (Bylund et al 1992; Fassbinder et al 1986; Peterman et al 1986; Schochetman & George 1992; Ujhelyi et al 1989).
  35. Terapia de interferón alfa en pacientes de hemodiálisis (Sungar et al 1994).
  36. Trasplante renal (Burkhardt et al 1987; Cordes & Ryan 1995; Neale et al 1985; Schleupner 1990; Ujehlyi et al 1989).
  37. Trasplante de órganos (Agbalika et ala 1992; Ng 1991).
  38. Infección de las vías respiratorias superiores (resfriado o gripe)(Challakere & Rapaport 1993).
  39. Infecciones víricas agudas, infecciones víricas del ADN (Cordes & Ryan 1995; Pearlman & Ballas 1994, Profitt & Yen-Liebereman 1993; Schleupner 1990; Steckelberg & Cockkerill 1988; Voevodin 1992).
  40. Gripe (Ng 1991).
  41. Vacunación de la gripe (Arnold et al 1994; Challakere & Rapaport 1993; Cordes & Ryan 1995; Hsia 1993; MacKenzie et al 1992; Profitt & Yen-Lieberman 1993; Simonsen et al 1995).
  42. Herpes simple I (Langedijk et al 1992).
  43. Herpes simple II (Challakere & Rapaport 1993).
  44. Virus de Epstein-Barr (Ozanne & Fauvel 1988).
  45. Exposición a vacunas víricas o infección vírica reciente (Challakere & Rapaport 1993).
  46. Embarazo en mujeres multíparas (Cordes & Ryan 1995; Ng 1991; Profitt & Yen-Lieberman 1993; Steckelberg & Cockerill 1988; Ujhelyi et al 1989; Abbott 1997).
  47. Cánceres (Pearlman & Ballas 1994).
  48. Mieloma múltiple (Bylund et ala 1992; Profitt & Yen-Lieberman 1993; Steckelber & Cockerill 1988).
  49. Trastornos hematológicos malignos y linfomas (Burkhardt et al 1987; Cordes & Ryan 1995; Profitt & Yen Lieberman 1993; Schleupner 1990; Steckelberg & Cockerill 1988).
  50. Fiebre Q con hepatitis asociada (Yale et al 1994).
  51. Hepatitis (Sungar 1994).
  52. Enfermedad hepática alcohólica (Bylund et al 1992; Cordes & Ryan 1995; Mendenhall eet al 1986; Pearlman & Ballas 1994; Schleupner 1990; Schochetman & George 1992; Steckelberg & Cockerill 1988).
  53. Colangitis esclerosante primaria (Schochetman & George 1992; Steckelberg & Cockerill 1988).
  54. Cirrosis biliar primaria (Cordes & Ryan 1995; Profitt & Yen-Lieberman 1993; Schleupner 1990; Steckelberg & Cockerill 1988).
  55. Síndrome de Stevens-Johnson (Burkhardt et al 1987; Cordes & Ryan 1995; Profitt & Yen-Lieberman 1993).
  56. Sangre “pegajosa” en Africanos (Jungkind et al 1986; Schleupner 1990; Schochetman & George 1992; Smith et al 1987; Van Brees et al 1985).
  57. Suero lipémico (sangre con niveles altos de grasas o lípidos) (Schochetman & Geoerge1992).
  58. Suero hemolizado (Schochetman & George 1992).
  59. Hiperbilirrubinemia (Bylund et al 1992; Cordes & Ryan 1995).
  60. Proteínas en el equipamiento usado para estos tests (Cordes & Ryan 1995).
  61. Otros retrovirus (Blomberg et al 1990; Cordes & Ryan 1995; Dock et al 1988;Schleupner 1990; Tribe et al 1988) 
Es interesante que todas las condiciones que causan reacciones positivas en los “tests VIH” en ausencia de VIH son condiciones que están presentes, con variedad en su distribución y concentración, en muchos “grupos de riego de SIDA” reconocidos en los países desarrollados, así como en un amplio porcentaje de africanos y gente de otras partes del mundo desarrollado. Esto quiere decir que muy probablemente muchos usuarios de drogas (incluidas algunas madres), ciertos varones gay, y algunos hemofílicos en los países desarrollados, así como la vasta mayoría de los habitantes en la mayor parte de los países de África, Asia, América del Sur y el Caribe, que reaccionan positivamente al test para el VIH, pueden muy bien ser debido a otras condiciones que la de estar infectado con VIH
 
Es escandaloso darse cuenta de que un diagnóstico de infección por VIH sea tan frecuentemente en tests que no son específicos para el VIH, e incluso peor cuando uno se da cuenta de que estos tests no específicos guían la prescripción de drogas antirretrovirales altamente tóxicas.

¿Cómo detectar un “falso positivo” y un “verdadero positivo”?

Para poder concluir qué tipo de “falso” es el paciente, debe acudirse a otro test. El  primero de ellos es el Test ELISA.
 
Este nuevo examen no reconoce la presencia de ningún virus, más si de anticuerpos que, según decenas de publicaciones científicas, no son específicos del virus. Algunas fuentes aseguran que este test fue patentado por el Dr. Robert Gallo, al día siguiente de su conferencia de prensa junto a la ministra de sanidad de los EE.UU.
 
En las mismas instrucciones del test se puede leer: 
 
“La prueba ELISA sola NO puede ser usada para diagnosticar SIDA, incluso varias pruebas de la misma muestra de sangre resultan reactivas y sugieren con alta probabilidad la presencia de anticuerpos anti VIH-1”
(Abbot 1997)

 Ver esta y otras imágenes del Test ELISA en el sitio hermano de MONARCAS México

Cuando el paciente se someta a esta prueba y ésta haya dado “Positivo”, todavía no puede ser considerado VIH+. Se necesita una “prueba confirmatoria” llamada Western Blod que tampoco detecta VIH, sino que comprueba valores de unas proteínas que se han adjudicado al supuesto virus.
Este examen tiene unas bandas que deben ser leídas e interpretadas por el médico. El tema central del Western Blot, es que esta interpretación no es internacional. Es decir que el mismo test puede ser leído como positivo en Venezuela y luego como negativo en Australia. Es decir, no existe un patrón para diagnosticar VIH usando este tipo de prueba mal llamada “confirmatoria”. Es por esta razón que en Inglaterra se ha prohibido el uso del Western Blot para diagnostico de VIH. 
 
En una de las instrucciones de un Western Blot, también, puede leerse: 
 
“No use esta prueba como la única base para el diagnostico de la infección por VIH-1”
(EPITOPE ORGANON TEKNIKA) 

Ver esta y otras imágenes del Test WESTERN BLOT en el sitio hermano de MONARCAS México

Las normas en Venezuela aseguran que una vez que estos 3 hayan dado positivos, entonces el examen sí es seropositivo. Si uno de los demás dio negativo, entonces no hay nada que temer.
De tener los tres exámenes positivos, se debe realizar un cuarto examen para detectar la “carga viral”, a través de la prueba de Reacción en Cadena de Polimerasa (PCR), inventado y patentado el Dr. Kary Mullis quién no solo es el disidente del VIH más importante y relevante de la ciencia médica, sino que es quién afirma que su técnica no sirve para hacer recuento de virus de ningún tipo y es por ello que en sus instrucciones se puede leer:

“La prueba de ampliación genética para monitorizar al VIH-1 no está prevista para ser usada como una prueba rastreadora del VIH ni como prueba diagnostica para confirmar la presencia de infección por VIH”
(Roche 2003) 


No cabe duda que estos exámenes identifican cualquier cosa (menos o incluso el propio VIH). Muchos de los ortodoxos en materia de medicina tradicional, defienden la teoría convencional a pesar de que les haya quedado demostrado que los tests para identificar el VIH no son confiables. Generalmente esto es debido a que personas que eran VIH-, luego de estar con un individuo VIH+, hayan pasado a estar en la misma condición. Esto no es casualidad. En definitiva sí hubo un contagio. Estos pacientes muchas veces se pierden entre tanta información ya que no hay forma de hacerles ver algo contrario a lo que definitivamente experimentan. Los 4 examen lo confirman.
 
Como en todo pensamiento, los disidentes del VIH muchas veces no tienen teorías homogéneas. Quizás por es apropiado buscar varias hipótesis que demuestren qué es lo que sucede en cada caso, incluso alguno aislado. 

Se hace énfasis en la teoría disidente ya que nunca antes alguna enfermedad había sido tan sospechosamente cuestionada y además tan llena de encrucijadas e historias.  

Para aquellos que consideran tener un virus, que incluso supieron en qué momento se les transmitió  y ahora les confunde saber que el virus del sida no existe; entonces:
 
¿Qué se transmitió?
 
Se transmitió un virus. Definitivamente sí se transmitió algún tipo de microorganismo. Pero; ¿es este organismo causante de una enfermedad llamada SIDA? definitivamente NO.
 
Como ya habíamos hecho mención en el post anterior, diferentes especialistas hablan del VIH como un virus inofensivo.
 
Peter Duesberg, por ejemplo:
 
La tesis esencial de la teoría de Duesberg es que el llamado VIH existe, si bien es inofensivo y en ningún caso causante del sida. Según Duesberg, la etiqueta "SIDA" engloba diversas situaciones de salud no necesariamente relacionadas como enfermedades causadas por la desnutrición (en el caso de África) y otras dolencias existentes ya antes del surgimiento del "fenómeno Sida" como los efectos tóxicos del consumo de drogas (principalmente poppers) las drogas anti-vih y la malnutrición. La hipótesis de las drogas sostiene que el sida es causado ya sea por las drogas recreativas y esto ha sido confirmado por Alan Leshner director del Instituto Nacional sobre Abuso de Drogas diciendo que "El uso indebido de drogas y el VIH son verdaderamente interrelacionados epidemias" , o por la cadena de ADN como terminadores prescrito cómo AZT o los fármacos anti-VIH, o por una combinación de ambos. De hecho, ha señalado que los propios medicamentos antirretrovirales terminadores son mucho más tóxicos que las drogas recreativas como la cocaína y la heroína. Además afirma que la nueva prueba PCR no detecta "el virus".
Fuente: Wikipedia, Peter Duesberg
 
Dra. Hulda Clark del mismo modo:
 
La interpretación según que el virus VIH "causa" el SIDA es simplista. Si eso fuera  verdad, todos los pacientes que asumen los eficaces fármacos contra el VIH deberían curar del SIDA. ¿No sería lógico que el eliminar la causa lleva a la curación? Pero la realidad demuestra que no curan.  Sin embargo, aunque dice que el VIH no es la causa del SIDA, la doctora Clark explica el porqué existe una correlación entre SIDA y VIH, y también explica como sucede.   
La doctora Clark demuestra que la causa del SIDA son principalmente toxinas que deprimen la producción de glóbulos blancos en la médula ósea y en la glándula del timo, o que matan directamente los glóbulos blancos. Ella afirma de también haber curado a los enfermos más avanzados de SIDA con su método. Para conocer los detalles sobre los descubrimientos de la doctora Clark, consulte su libro "The Cure for HIV/AIDS" ("La Cura del VIH/SIDA"). La edición puesta al día de este libro presenta bastantes nuevos casos clínicos. Tome nota del hecho que aquellos casos clínicos no son considerados científicos por las entes gubernamentales de los Estados Unidos.

Aquellos no científicos que califican de pseudociencia a los disidentes del SIDA y se inclinan más hacia una teoría que les ofrece un camino corto y peligroso, sería bueno cuestinarles lo siguiente:

¿Qué beneficios obtendrían los disidentes del VIH al negar el virus? La negación del VIH invita a la tranquilidad del individuo, no al pánico. No intentan vender nada, solo transmitir una idea.

¿Quién por el contrario tiene beneficios económicos con su teoría? La ciencia médica y la industria farmacéutica. 

Si aún así existen dudas en tu pensamiento; recuerda que la sífilis la trataban con arsénico y mataron a miles de personas hasta que se descubrió que fue un terrible error. También del Escorbuto se afirmaba que era una enfermedad sexual y después de muchos años se descubrió que era una avitaminosis producida por deficiencia de vitamina C.
El cigarrillo era recomendado por médicos hasta hace 50 años para calmar los nervios.

La medicina puede equivocarse, incluso intencionalmente. 

De Copérnico se reían por decir que la tierra giraba alrededor del sol y encarcelaron a Galileo por creer que la tierra era redonda... 

Ya es hora de aprender cómo funciona la humanidad.

 

miércoles, 27 de junio de 2012

¿Qué es el VIH?

La definición médica convencional nos dice que el VIH o virus de inmunodeficiencia humana, es el causante del SIDA. Se asegura que pasó a los humanos por un contagio de simios que sorpresivamente ya poseían un “Virus de Inmunodeficiencia Simia” (SIV por sus siglas en Internet) y que a diferencia del VIH, éste no causa inmunodeficiencia en los simios, salvo en el caso del salto de una especie a otra.  En pocas palabras, el virus no es capaz de inmunosuprimir a ninguna especie animal más que al ser humano. 
 
En 1981 una población de hombres homosexuales que habitaban principalmente en Nueva York y San Francisco, comenzaban a presentar enfermedades muy poco convencionales tales como el sarcoma de Kaposi y la neumocistosis.  La ciencia de inmediato concluyó que esto era provocado por una epidemia causada por un agente infeccioso.                       
Poco después, Luc Montagnier (Francia) y Robert Gallo (Estados Unidos) con un año de diferencia, identifican que dicha infección es producida por un retrovirus humano al que más adelante llamarán (VIH).

 
Fue en 1983, que se dijo con “extrema certeza” que la infección y diseminación se hace a través del contacto sexual entre varones homosexuales, transfusiones sanguíneas y drogas intravenosas con jeringas contaminadas, mientras el Instituto Pasteur en Francia, reporta el supuesto aislamiento y la identificación del virus que puede ser la causa del SIDA; sin embargo Luc Montagnier (investigador de dicho instituto) tiempo después reconoció no haber aislado el VIH.

 
Eleni Papadopulo, biofísica griego-australiana miembro del Grupo Pert,  sostiene que la existencia del VIH sigue sin estar demostrada, basándose en que las fotos no están aisladas ni purificadas, ni tienen todas las características morfológicas de los retrovirus. Además, las muestras de sangre de los no infectados (controles) no se había estimulado como se hizo con aquellos cultivos supuestamente infectados. Papadopulos afirma que en ningún momento en la investigación VIH-sida se han seguido la reglas necesarias y suficientes para demostrar la existencia de un nuevo retrovirus, acordadas por el Instituto Pasteur en 1973.

 
Existen otros científicos disidentes que apoyan en cualquier medida alguna teoría sobre el supuesto virus. Tal es el caso del virólogo Peter Duesberg, quien no cierra la posibilidad de la existencia de un virus; sin embargo, concluye que éste es inofensivo y además no es el causante del SIDA. Según Duesberg, esta enfermedad engloba diversas situaciones de salud no necesariamente relacionadas con el virus, principalmente  enfermedades causadas por la desnutrición (en el caso de África) así como los efectos tóxicos del consumo de drogas (principalmente Poppers). Sin embargo, en los pacientes etiquetados VIH positivo, la causa para desarrollar dicha enfermedad es en definitiva los antirretrovirales y la malnutrición. 

 
La hipótesis de Duesberg sobre los cofactores causantes del SIDA, es para nosotros la más acertada. En los años ochenta, después de aquel extraordinario fenómeno, la droga prescrita como inhibidor del VIH era el AZT, un químico altamente tóxico.  De hecho, Peter Duesberg asegura que los antirretrovirales son incluso mucho más tóxicos que las drogas recreativas como la cocaína y la heroína. Además afirma que la prueba PCR inventada por Kary Mullis (el más importante científico disidente del VIH) no detecta "el virus" y que en lugar de ello, detecta una pequeñísima pieza del ARN del genoma del virus. La dificultad en la detección del virus infeccioso fue motivo de la acusación de fraude entre el Instituto Pasteur contra el SIDA y los investigadores principales en los EE.UU. (Gallo) y el Reino Unido (Weiss).


La Dra. Hulda Clark una bióloga canadiense, explica el porqué existe una correlación entre SIDA y el supuesto VIH además de explicar cómo sucede. Según comenta, la causa del SIDA son principalmente toxinas que deprimen la producción de glóbulos blancos en la médula ósea y en la glándula del timo y que eliminan algunos glóbulos blancos. A las personas que tienen un sistema de defensas muy deficiente puede que esto les afecte y les convierta la situación en algo complicado con el tiempo, más, si a esto se le suma medicación inmunosupresora.  Ella afirma de haber curado a enfermos más avanzados de SIDA con su método denominado Zapper.
 
La interpretación según que el virus VIH "causa" el SIDA es simplista. Si eso fuera  verdad, todos los pacientes que asumen los eficaces fármacos contra el VIH deberían curarse del SIDA. Entonces, ¿Es que acaso los medicamentos prolongan la vida? ¿No sería lógico que el eliminar la causa llevara a la curación?

 

miércoles, 14 de diciembre de 2011

¿Qué es el SIDA?

Se conoce como SIDA, a aquella incapacidad del sistema inmunológico de hacer frente a infecciones y otras patologías que culminan con la muerte del individuo.
El acrónimo de esta palabra es Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida.


La definición mejor aceptada por la comunidad médica del mundo, indica que es una enfermedad zoonótica (transmitida del animal al hombre) producida por el contagio infeccioso del virus de la inmunodeficiencia humana (VIH). Del mismo modo, la medicina correlativa asegura que este virus, suprime el sistema de defensas haciendo que el organismo no sea capaz de dar una respuesta inmune adecuada contra las infecciones.


En pocas palabras, la ciencia asegura que:
"Si no tienes el virus VIH, no hay posibilidad de contraer SIDA." 


Si existiera una incapacidad en el Sistema Inmunológico para luchar contra las enfermedades, desencadenaría en SIDA sólo si el paciente es VIH positivo. 
Si el paciente muere por un sistema inmune débil pero es VIH negativo, no se considera SIDA la causa de su muerte.
 
Con todo esto podemos decir que:

Muerte por Neumonía.
 


Paciente VIH positivo  - Murió de SIDA
Paciente VIH negativo - Murió de Neumonía


Muerte por Malaria


Paciente VIH positivo  - Murió de SIDA
Paciente VIH negativo - Murió de Malaria



Es muy común escuchar expresiones incorrectas que hacen mención al SIDA como un virus, teniendo en cuenta que dicho virus es llamado VIH. Es probable que la desinformación que existe no permita separar ambas definiciones. Basta con preguntarle a cualquier persona sobre el SIDA, para darse cuenta lo mal informada que está. Y no es culpa de nadie. La realidad es que no ha habido a ciencia cierta una matriz veraz y sencilla capaz de aclarar todo lo relacionado con este problema de salud. Incluso algunos profesionales de la medicina tienden a evadir explicaciones, acudiendo a definiciones confusas que disfrazan astutamente su ignorancia en el tema.
 
El SIDA se ha convertido en un controversial asunto de salud pública. La participación mediática ha sido casi únicamente para fomentar la contribución financiera y para la prevención de la enfermedad; sin embargo, no han sido un canal informativo para conocer de qué se trata esta singular patología. Campañas millonarias se desarrollan en el Primer Mundo intentando salvar y ayudar a las personas infectadas -muy particularmente a los niños-  para que puedan salir de su padecimiento. Contradictoriamente, se utiliza el término “salvar” para enfermedad que ha sido catalogada “incurable”.


Durante décadas África ha sido azotada por problemas de salud que han arrasado con la vida de millones de personas. Aún cuando los deficientes servicios sanitarios son la principal causa de las afecciones mortales en el continente negro, desde hace 30 años se habla del SIDA como el principal escenario de muerte de miles de personas. En el año 2007, el 72% de las muertes relacionadas con el SIDA en el mundo ocurrieron en África subsahariana. Si los índices de muerte por la enfermedad son inferiores en los países con un óptimo sistema de salud pública, contrario a los países con condiciones higiénicas deplorables donde los índices de mortalidad son superiores, es probable que en algún momento se tenga que asumir que el VIH no es necesariamente causal del SIDA. Es más probable que la muerte de miles de personas se deba a la falta de elementos básicos para la vida, como la calidad del agua y los alimentos, así como mejoras en las condiciones humanas frente a las infecciones y las enfermedades.

Responsablemente, este blog intenta dar una información alternativa a la teoría mediáticamente divulgada, partiendo de la opinión de especialistas que comparten la disidencia del VIH.